La planificación financiera no entiende de edades y nunca es un mal momento para llevarla a cabo. Eso sí, abordarla en distintas etapas vitales trae consigo diferentes enfoques: las metas financieras de un joven recién entrado en el mercado laboral difieren de los objetivos de una madre de familia de mediana edad o de un prejubilado con la vista puesta en la pensión.
No obstante, existen ciertos hábitos y prácticas que denotan salud financiera y reman a favor del patrimonio personal, sea cual sea el momento vital que atravesemos. Las fuentes consultadas por Finect explican que en las finanzas personales no pueden faltar aspectos como el conocimiento personal (¿qué nivel de riesgo se está dispuesto a asumir?), los objetivos que el particular quiere alcanzar o la forma de cumplirlos en el tiempo (con aportaciones periódicas y diversificando).
“Lo primero que se debe hacer, independientemente de la edad, es perfilar a la persona según su nivel de riesgo y preguntarle el horizonte temporal de su inversión”, advierte Eduardo Suárez, asesor financiero en Mapfre Gestión Patrimonial. Pasar de ahorrador a inversor, asumir algo de riesgo (más en un entorno de tipo cero o negativos y con alta inflación) o canalizar el ahorro con aportaciones periódicas son otras claves apuntadas por este asesor. “Siempre de forma muy diversificada y acompañados de un asesor financiero certificado”, expone Pere Font, consejero patrimonial en AXA Exclusiv.
Francisco Martínez, asesor financiero en Andbank, señala por su parte: “Los hábitos financieros más importantes, independientemente de la edad, son la planificación, y la disciplina con la que se aplica la planificación”. El ahorrador debe pasar por distintas etapas, que empiezan por elaborar un plan financiero integral que detalle ingresos esperados y gastos conocidos (así como los extraordinarios). El siguiente paso es “considerar la inversión del ahorro teniendo en cuenta todos los objetivos pretendidos”. El horizonte temporal, junto a la situación financiera y la tolerancia al riesgo, marcan el perfil con el que se construirá una estrategia de inversión que debemos monitorizar en el tiempo, afirma Martínez.
MiCappital también da prioridad al plazo de la inversión, por encima de la edad en el momento de invertir. “Tenemos muchos casos de clientes jóvenes que, aunque tienen un horizonte temporal de vida muy largo, su objetivo es poder dar la entrada de una vivienda en menos de 5 años”, explica Borja Nieto, cofundador de MiCappital. “Mientras que hay personas más mayores que ya tienen un inmueble e invierten pensando en rentabilizar los ahorros en la cuenta corriente, además de dejar la mayor cantidad a sus hijos”, añade.
La plataforma de Finect permite a cualquier usuario registrado consultar con expertos financieros su situación particular. También cuenta con escaparates de inversión ajustados a perfiles de riesgo y por temáticas de inversión.
Una persona joven
Eduardo Suárez señala que en “”la primera etapa de tu vida laboral el nivel de ingresos es bajo, por lo que la capacidad de ahorro es mínima”. Los objetivos se amoldan normalmente al corto plazo: comprar piso, cambio de coche, algún viaje. Sin embargo, el asesor de Mapfre afirma que esas metas pueden variar y enfocarse, por ejemplo, a comenzar una preparación de la jubilación: “La recomendación es asumir alto componente de riesgo, ya que tendrá muchos más años para trabajar su dinero y así se aprovechará de los grandes beneficios del interés compuesto (reinversión de intereses a tu capital)”.
Carlos González, director de relación con inversores en Cobas Asset Management, también destaca las oportunidades que “la magia del interés compuesto” pueden aportar al capital de los adultos jóvenes. “Resulta muy gratificante ver la evolución de tu patrimonio con el paso de los años”, añade. Asimismo, esta etapa es un buen momento para aprovechar las oportunidades financieras a largo plazo y entender la importancia de la paciencia, “clave del éxito para cualquier inversión”, destacan desde Cobas AM.
Pere Font es partidario de destinar una parte del primer ingreso al ahorro: “No inferior al 10%, invirtiendo este según nuestro perfil y edad”. En todo caso, las edades tempranas normalmente permiten asumir bastante riesgo, gracias al plazo de tiempo más amplio de los jóvenes, indica el consejero de AXA Exclusiv.
Una persona de mediana edad
El nivel de ingresos ya es superior a la anterior etapa y los objetivos vitales difieren. Muchos de estas personas tendrán hijos por lo que deben plantearse hacer un plan de ahorro para ellos con vistas a estudiar en la Universidad, indica Suárez. Según el asesor, crece también la importancia de crear una bolsa de ahorro para complementar la jubilación, “para que no haya mucha merma en el poder adquisitivo cuando una persona se jubile”.
Carlos González hace dos puntualizaciones sobre la planificación financiera en edades intermedias. La primera de ellas, “nunca tomar decisiones de inversión en función de rentabilidades pasadas”. Es decir, evaluar siempre que sea posible la estrategia de inversión del gestor al que se confían los ahorros personales. La segunda, entender que “la volatilidad no es riesgo”, explica el responsable de Cobas AM. Las distorsiones en los mercados son momentos oportunos para encontrar “buenos negocios a precios muy atractivos”.
Jubilación próxima
La recta final para el retiro implica proteger el patrimonio, que pasa a ser habitualmente la prioridad en edades avanzadas, indican los expertos consultados. “”A medida que el momento de la jubilación se acerca, habrá que reducir el riesgo en cartera, siempre que el bienestar en el retiro dependa del patrimonio acumulado. Por tanto, la regla general de reducción del riesgo cuanta más edad”, asegura Francisco Martínez. Con todo, no se trata de una regla de oro: “No siempre es aplicable y dependerá de la situación financiera”, apostilla el asesor de Andbank.
Los gestores añaden un hábito que no puede faltar en la preparación de la jubilación: el rescate de los productos financieros. “Cobra importancia tener un buen asesoramiento en el rescate del plan de pensiones para su fiscalidad y lo ideal sería rescatarlo en forma de rentas”, sugiere Eduardo Suárez, que advierte que con la reducción de gastos se abre una oportunidad para sacar rentabilidad a los ahorros con alternativas de inversión.
Cobas AM subraya que la prioridad de conservar el ahorro desaconseja apuestas por activos como la renta variable: “Si no estás dispuesto a ver tu patrimonio reducido más de un 15% de forma temporal, es mejor no invertir en renta variable”. Además, los instantes previos al retiro son un momento para desprenderse de una inversión que “no te deja dormir, de forma literal”, agrega Carlos González. “Empezaremos con un riesgo máximo que iremos reduciendo al acercarnos al momento de disponer del patrimonio ahorrado e invertido”, anota Pere Font como receta del éxito financiero.
FUENTE: https://www.eleconomista.es/mercados-cotizaciones/noticias/11542857/12/21/Planifica-tus-finanzas-segun-tu-edad-estos-son-los-habitos-sagrados-en-cada-etapa-de-tu-vida.html